Los mejores templos para los niños

Horario: Todos los días de 08h30 a 16h00.
Precio de la entrada: 20 baht

Wat Suthat es un lugar interesante para niños y adultos. Se trata de un importante monasterio budista cuya construcción comenzó en la época del rey Rama II y donde hay una bonita imagen de Buda que data del período Sukhothai, así como muchas otras cosas para ver.

Dentro del recinto del monasterio encontrarás muchas estatuas de animales ¿Por qué no hacer un safari fotográfico y tratar de adivinar los nombres de todas las diferentes especies?

Para añadir un toque mágico a vuestra visita, podrías contarles a tus hijos la siguiente leyenda: Hace mucho tiempo, cuando todavía no había una gran ciudad aquí, solo campo, hubo unas terribles inundaciones en esta área. El único edificio que permaneció en pie fue este templo, por lo que muchos animales vinieron en busca de refugio. Un hábil monje esculpió las estatuas con estas criaturas como sus modelos.

Alrededor del ubosot hay un grupo de soldados de piedra que lo protegen. Sus tranquilas y amables sonrisas merecen una fotografía junto a ellas.

Por cierto, rendir homenaje a la imagen principal de Buda de este templo, se cree, te convierte en un líder con visión.

Wat Arun, el ubosot.

Horario: todos los días de 08h30 a 16h00.
Precio de la entrada: 100 baht.

Atención: Ya no está permitido subir al piso intermedio de la torre central.

Si no deseas añadir la visita a un nuevo templo, puedes pasar un tiempo con tus hijos en el recinto del ubosot o salón de ordenaciones del Wat Arun. Se encuentra junto a los prangs (torres).

Alrededor del edificio del ubosot, bellamente decorado, hay numerosas esculturas de piedra, así como docenas de estatuas de Buda en la posición de ‘sometiendo a Mara’, en el claustro.

Según la leyenda, todas las noches, cuando el templo está vacío, las estatuas cobran vida y se reúnen para cenar o celebrar festivales en honor de Buda.

Al amanecer, de nuevo se vuelven estatuas.

Es lo que le sucedió a esta chica justo cuando se estaba haciendo una foto, a ese hombre cuando tocaba la flauta y a su amigo, mientras bailaba con la música. Este otro hombre estaba pensando en algo, pero ¿quién sabe qué?
Todas las mañanas los monjes tienen que devolver las estatuas a sus posiciones antes de que entren los visitantes y así puedan caminar por el templo.

En caso de que esta historia no te convenza, puedes sugerirles a los niños que cuenten las estatuas de Buda 😉
Hay docenas en el claustro.

Wat Pho

Horario de atención: 08h00 – 17h00
Precio de la entrada: 100 baht.

Junto al Gran Palacio, este es un monasterio interesante por varias razones, si bien su fama se debe al Buda reclinado gigante. El gran tamaño no cambia la esencia espiritual de la estatua, pero los niños aprecian las cosas realmente grandes como ocurre con ésta. También les gustará la fila de cuencos donde podrán depositar más de cien monedas.

Wat Saket y la Montaña Dorada

Horario: todos los días de 09h00 a 17h00.
Precio de la entrada: 50 baht

El Wat Saket es el cuarto y último templo que recomendamos. Una visita que te ofrecerá una vista aérea de la ciudad.
Está situado en la cima de una pequeña colina que tienes que subir andando. Es perfecto para que los niños quemen energía y por la noche duerman como troncos.

The Wat Saket and the Golden Mountain.
The Wat Saket and the Golden Mountain

Las vistas desde la terraza superior donde se encuentra la estupa hacen que la subida valga la pena. Además, los niños podrán tocar las campanas y los gongs colocados en el camino y en la terraza.

The Wat Saket and the Golden Mountain.
The Wat Saket and the Golden Mountain.
The Wat Saket and the Golden Mountain.

Explanada Sanam Luang

Sanam Luang es una explanada ubicada justo en frente del Gran Palacio y alberga las ceremonias reales, como sucede con la Ceremonia de Arado Real cada mes de mayo. Por esta razón, el acceso a veces no está permitido.

La falta de sombras hace que no sea muy atractivo durante las horas del día en las que el sol está más activo. No obstante, especialmente por la tarde, se convierte en un hermoso campo con cesped para disfrutar con los niños, especialmente los más pequeños y los bebés porque la hierba está limpia y pueden gatear sin más riesgos de lo habitual.

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